Cuando buscamos un sistema de protección para el jardín queremos inmediatez. Lo queremos ya y esto hace que la opción de soluciones como Aki pérgolas nos resulte atractiva. Pero antes de tomar una decisión te recomendamos pararte a pensar y sopesar las ventajas e inconvenientes de esta propuesta.
Aki pérgolas, ventajas
Como hemos comentado uno de los mayores atractivos es la rapidez. Aki pérgolas te permite escoger un modelo y llevártelo directamente para empezar a instalarlo de manera inmediata.
No cabe duda que esta es una ventaja muy grande. En poco tiempo disfrutarás de un espacio en el jardín con protección contra la fuerza del sol o de las corrientes de aire.
Aki pérgolas dispone de diferentes modelos de pérgolas. Hay pérgolas de estructura de madera y otras de estructura de aluminio. En el sistema de cobertura también tienes donde elegir: travesaños de madera, viguetas de aluminio y sistemas de toldos fijos a retráctiles.
En las dimensiones también tienes dónde elegir. Las propuestas más habituales son pérgolas de 3×3, 3×4 o 4×4 metros.
Además, las pérgolas de Aki son fáciles de montar. No tendrás que llamar a un instalador y siguiendo las instrucciones de montaje tú mismo podrás transformar un jardín en un refugio más práctico. Y todo esto por un precio económico al alcance de todos los bolsillos.
Aki pérgolas, desventajas
Aunque la propuesta de Aki pérgolas es atractiva, también tiene sus inconvenientes. Lo primero es que Aki pérgolas te presenta un catálogo cerrado de posibilidades. Tienes diferentes modelos pero te tienes que adaptar a ellos.
Es decir, pierdas la libertad de crear tu propia pérgola. Si quieres una pérgola pequeñita o una de grandes dimensiones el bricolaje estándar no te vale.
Los materiales de las pérgolas estándar son correctos, pero si buscas una mayor calidad, robustez y durabilidad no es posible.
El sistema de cobertura es limitado, no puedes disponer de unos toldos con tratamientos antihumedad, impermeables o de alta protección ante los rayos solares.
Tampoco puedes contar con sistemas de sensores de lluvia, de intensidad de sol o de viento que permiten recoger o extender el toldo para proteger la tela y también para controlar la ventilación y temperatura.
Y, por supuesto, en las pérgolas como las de Aki no podrás personalizarla con estampados, accesorios de decoración.