El verano ya está aquí y con él las largas tardes y noches en las que disfrutar al aire libre. Para una mayor comodidad instala una pérgola en tu jardín. Es una solución idónea para disponer de un espacio ventilado y protegido para estar con los tuyos.
La pérgola en tu jardín puede ser el elemento que te ayude a sacar más partido a este espacio. Cuando llega la época estival, es normal que queramos salir de las habitaciones y salones y disfrutar del buen tiempo. Pero también es cierto que el clima es a veces demasiado extremo y durante las horas de sol la temperatura es tan elevada que no se puede permanecer a la intemperie. Esto obviamente limita los espacios del jardín, pero al instalar una pérgola habilitas un espacio intermedio, un lugar protegido pero a la vez abierto.
Las opciones para instalar una pérgola en tu jardín son muchas. A simple vista puede parecer que es solo una estructura con cuatro columnas y una techumbre, pero las actuales pérgolas brindan múltiples variedades de modelos y diseños que las convierten en elementos arquitectónicos y decorativos que darán a tu casa un aspecto exclusivo.
¿Qué opciones hay? Pues, tantas como gustos. Partiendo de una estructura base le puedes añadir, toldos, listones, colores, accesorios y complementos para que este nuevo espacio plasme tu estilo.
En cuanto a la estructura hay dos opciones: una pérgola independiente que instales en cualquier parte del jardín o una pérgola tipo porche, es decir, apoyada en una de la paredes de la casa o en un muro que limita la propiedad.
La elección de una pérgola independiente permite crear un espacio nuevo dentro del jardín, un refugio en el tomar un refresco o cenar mientras se disfruta del frescor del césped y de las plantas. También puede ser un lugar situado junto a una piscina en el que secarse tras un baño y relajarse.
Por otra parte, la pérgola tipo porche se convierte en un elemento arquitectónico más de la vivienda. Una zona que permite enlazar las ventajas de estar cerca de la casa y estar al aire libre.
Respecto a las coberturas son el toque especial que puede dar un estilo único a una pérgola en tu jardín. Una de las opciones más habituales es la de toldos plegables con ondas. Estos toldos son correderos y se pueden extender o recoger según se quiera sol o no. Pero también hay otras opciones como una techumbre de listones o toldos planos horizontales y verticales. Todo esto unido a una gran gama de colores y texturas de las telas que permiten crear espacios originales y, ante todo, prácticos.