Tener un ático es un lujo, es un privilegio que te permite disfrutar de una zona privada al aire libre con unas vistas estupendas. Así que, si quieres sacarle el máximo partido y estás buscando pérgolas para áticos, recuerda que hay una serie de aspectos clave que te ayudarán a escoger el modelo con mayores beneficios. Entre los aspectos más importantes ten en cuenta:
- La firmeza y ligereza de la estructura
- La adaptabilidad
- El diseño
Cómo deben ser las estructura de pérgolas para áticos
Uno de los puntos clave de las pérgolas para áticos es la estructura. Es la base sobre la que se apoya todo y por eso debes prestar mucha atención al material y a las dimensiones. El tamaño de la pérgola estará determinado por el espacio del que dispongas en la terraza y por el uso que quieras dar a la pérgola.
En cuanto al material de la estructura hay que tener en cuenta que las pérgolas para áticos deben ser ligeras. Están sobre un edificio y un peso excesivo o mal emplazado puede afectar a la estructura del bloque.
Teniendo esto en cuenta el mejor material para pérgolas para áticos es el aluminio. Un material ligero pero que es altamente resistente. Las estructuras hechas con aluminio resisten la fuerza del viento -algo que en ático es más que probable que azote con intensidad- y también otras inclemencias del tiempo como la lluvia sin que esta oxide el entramado.
Pérgolas para áticos adaptadas y diseñadas para ti
Una pérgola es un espacio privado en el que puedes relajarte y olvidarte de la presión del día a día. Por eso es importante que se adapte a ti, a tus necesidades y que a la vez tenga un diseño y estilismo que encaje con tu personalidad.
Para conseguir una pérgola a tu medida, estudia tu ático: los metros cuadrados de los que dispones, el espacio que quieres que ocupe la pérgola, la orientación del sol y los obstáculos arquitectónicos. Una vez que conozcas el entorno y tengas claro lo que quieres es cuando puedes decidir cómo quieres que sea la pérgola.
Puede ser una pérgola independiente o con apoyo en las paredes de la terraza o en la barandilla. El aluminio es un material versátil que permite jugar con las formas hasta dar con el diseño que encaja con tus gustos y necesidades.
Tu toque personal
La diferenciación de las pérgolas para áticos viene de la mano del techo. El sistema de cobertura y, por supuesto, los accesorios y detalles son los que marcan la diferencia.
Aunque hay distintas opciones, para una pérgola en un ático el sistema retráctil con toldos es muy práctico. Permite extender o recoger los toldos para poder disfrutar del cielo raso o tener una protección frente a la intensidad del sol o del viento.
Se puede jugar con las zonas de sol y sombra y ayuda a controlar la temperatura para tener siempre un ambiente que permita el disfrute. Además, los toldos con los diferentes tipos de tejidos, colores y estampados son la mejor forma de personalizar este espacio.