Una tarde tranquila en tu jardín disfrutando de un refresco sin las molestias ni de la fuerza de los rayos del sol ni del viento. Ese es el ideal que muchos tenemos en la cabeza y que gracias a las pérgolas prefabricadas a medida puede ser una realidad.
Una solución a tu alcance
A menudo no nos damos cuenta que las soluciones más sencillas están a nuestro alcance. Y eso es lo que son las pérgolas prefabricadas: la opción más fácil y económica para crear un espacio donde disfrutar del aire libre.
Con las pérgolas prefabricadas podemos crear un espacio único en nuestra terraza o jardín. Sin necesidad de grandes obras podemos habilitar un porche donde colocar una mesa y unas sillas y convertirlo en un comedor exterior.
Realizar un porche de obra es más complicado, hay que tener en cuenta más aspectos como la obra y el coste. Además si elegimos esta opción será algo permanente, algo que si cambiamos de opinión o tenemos otros proyectos para esa zona es más complicado de cambiar.
Sin embargo con las pérgolas prefabricadas un cambio de enfoque es más sencillo de afrontar.
Tú decides cómo
Con frecuencia pensamos que los productos prefabricados nos limitan. Pero en el caso de las pérgolas prefabricadas las opciones son muchas.
Es cierto que los elementos con los que se juega tienen unas medidas y formas determinadas. Sin embargo, el actual catálogo es muy amplio y las combinaciones posibles muchas.
Gracias a esto puedes crear una pérgola de dimensiones muy diversas. Desde un pequeño espacio a un porche grande, amplio e incluso con distintos ambientes.
En cuanto a los materiales lo más habitual es el aluminio, pero en los acabados hay mucho donde elegir. Desde los estilos más sencillos de líneas puras a las imitaciones a madera con molduras para las vigas.
En lo relacionado con la cobertura las opciones son también muchas. Techos con travesaños de aluminio, con toldos fijos o retráctiles en distintos colores y materiales o la versión más ecológica y con más prestaciones que es la pérgola bioclimática.
Las opciones están ahí, tú decides cómo quieres tu pérgola.